Kava s Scarlet Ortiz

ZELO ZANIMIV INTERVJU S SCARLET...PRIPOROČAM!!


CAFÉ CON... Scarlet Ortiz: “Soy la peor en la cocina”[/big][/big][/color][/b]
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Scarlet Ortiz llega puntual a la cita en Televen. “Son las 12.00 del mediodía, tal como prometí”, exclama la actriz mientras coloca su bolso en la mesa. Está sin maquillaje y lleva ropa deportiva. “¿Ya pediste el café o quieres otra cosa?”, dice antes de comenzar con nuestra entrevista. La artista es la protagonista de la nueva telenovela del canal de Horizonte: Dulce amargo, una coproducción con Telemundo y Cadena Tres que reúne un elenco internacional y trae de vuelta a Ortiz, quien estuvo retirada de la pantalla criolla durante 12 años.

“Sí, pasó todo ese tiempo mientras estuve trabajando en muchos países. Lo último que hice aquí fue ‘Mi tres hermanas’, y siento que era el tiempo perfecto para regresar a casa por un largo rato. Es muy grato ver ‘El Ávila’ todos los días y tener cerca a mi mamá y a mi papá, aunque nunca los dejé por completo porque en diciembre siempre venía a comerme mi hallaca y mi ensalada de gallina”, expresa Scarlet, mientras endulza su café manifestando entre risas: “ Le voy a echar un edulcorante que me dio Roxana Díaz, porque sabes que entre nosotras nos cuidamos. Dicen que hay unos azúcares ligeros que borran la memoria y ¿te imaginas? Ya yo no tengo la memoria de antes”. El nuevo personaje la tiene muy entusiasmada. Sobre la trama revela: “Mariana no es tan sufrida como mis otros roles. Es una emergencióloga; tiene un hijo de seis años y un esposo que ama, pero llegará un momento en el que los abandonará y será víctima de ella misma”.

A Scarlet le contenta saborear la gastronomía venezolana a diario. “Chamo, es que aquí se come muy rico. Yo amo la reina pepiada, el pabellón criollo, el plátano horneado. Los calditos de gallina. Realmente creo que tengo una gordita interna. Mi espíritu es de gordita porque como mucho, aunque soy la peor en la cocina. Lo mejor que me queda es el refresco con hielo. Aprendí a hacer el pasticho a lo venezolano. Es lo único que me queda bien. Pasé cuatro horas con mi mamá al teléfono explicándome y después dos horas con mi tía diciéndome cómo se hacía la salsa bechamel. En la familia el que cocina es Yul (su pareja desde hace 13 años), él hace muchos platos y me ayuda, en conjunto con mi nana que es de Colombia”, acota la pelinegra que realizó en México la tercera versión de “Rafaela”. “En Televisa me fue increíble, de hecho, me llamaron otra vez, pero ya estaba comprometida con Televen. La gente de esa novela (Rafaela) es como mi familia. Adopté a Tiaré Scanda, Patricia Reyes Spíndola y Chantal Andere, quienes son mis grandes amigas. Allá hay un sindicato de actores y nos respetan mucho. Aquí estamos desprotegidos. En México cuidan nuestros horarios de comida, de sueño, y es muy valioso porque uno rinde mucho más”, cuenta la protagonista de “Todos quieren con Marilyn” y “Secreto de amor”.

La estrella de los dramáticos criollos tuvo su primer contacto con la farándula hace 20 años, al participar en el Miss Venezuela 1992: “Fui miss Sucre y competí con Natalia Streignard, Gabriela Spanic y Michelle Badillo. Gaby y yo quedamos detrás de la ambulancia. El certamen me ayudó a vencer la timidez. Osmel quiso que estuviera ahí, aunque yo tenía mucho miedo, luego Gisselle Reyes me preparó. Lo mejor es que no tuve que hacer tanta dieta porque era muy flaca. Tengo los senos hechos de ese tiempo y nunca más me operé porque le temo al dolor. Yo las veía a todas ‘pechugonas’ y también las quería así, fue entonces cuando Osmel me los agrandó y fui muy feliz (risas). Hice una amistad muy grande con Gaby Spanic, éramos muy buenas amigas. Lamentablemente el tiempo y las distancias nos separaron, pero donde nos vemos nos tratamos con mucho cariño. A Natalia la he visto en Miami ahora que tiene bebé y a Michelle estoy por llamarla porque está embarazada”. El primer trabajo en televisión de Ortiz fue el programa Nubeluz, en el que conoció a Gaby Espino, su gran amiga y comadre. “Ella es mi hermana y la adoro. Yo soy la madrina de su hija Oriana, pero ella no lo es de mi hija Bárbara. Lo que pasa es que ya yo había comprometido a otra amiga, Mónica Ferrara. Gracias a Dios, Gaby me perdonó (risas)”.

De su niñez, Scarlet recuerda que veía las telenovelas a escondidas. “Mi mamá no me las dejaba ver. Apurada me devoraba a ‘Estefanía’, bueno, la repetición. Tampoco soy tan vieja”. Los inicios de Scarlet en “Llovizna” no fueron color de rosa. Su madre no aceptaba que fuera actriz. “Mi papá tuvo que hablar con ella. Ser protagonista de golpe fue un shock, ¡no te imaginas! Trabajar con Luis Fernández, Caridad Canelón, Javier Vidal...¡wao! Verlos en una escena conmigo fue un choque emocional muy grande. Un día llamé a mi mamá llorando y me pidió que dejara todo, pero mi papá me dijo: ‘Usted quería hacerlo y lo va a hacer porque está capacitada y punto”.

De sus experiencias internacionales guarda principal afecto por su participación en “Betty, la fea”. “No me lo creía. Fue un convenio de RCN con Rctv. Ellos pidieron una actriz venezolana y José Simón Escalona decidió enviarme a mí. Yo casi me desmayo porque era fan de esa novela”, prosigue la artista que se cortó el cabello para su protagónico en “Todo sobre Camila”, grabada en Perú. “Fue un error cortarme el pelo como un hombre. A mí me gustó verme diferente, pero al público no. Y lo peor fue que me rechazaron dos veces por tener el pelo así. Fue cuando me di un receso y entendí que la gente me quiere así, y así me tendrán”, recalca Scarlet.

Še eno vprašanje iz njenega intervjuja, kjer zopet pove kako vesela je, da spet sodeluje z Roxano

¿Se reencontró con compañeros de trabajo?
-Sí. Cuando estaba en Venezuela siempre trabajé en RCTV, entonces en la parte de producción están muchos dentro de Televen, cosa que me parece maravillosa. Eso me ayudó a sentirme más en confianza, más a gusto porque ya existe el precedente de haber trabajado juntos, eso es muy bonito. También me encontré nuevamente con Roxana Díaz, a quien adoro porque fue una excelente contrafigura cuando trabajamos en Mis tres hermanas, ha sido una de mis mejores antagonistas. Veo que sigue siendo esa misma Roxana divertida, profesional y muy cariñosa. Cuando te vas durante tanto tiempo, tienes como ese temo de si habrá cambiado la gente, cómo te verán ahora Yo me imagino que las personas que se quedan acá piensan igual, pensarán cómo estará uno de cambiado. Al volver y ver que seguimos siendo los mismos, pero con más experiencia, es muy agradable.